MEMORIA HISTÓRICA
Posted: jueves, 25 de julio de 2013 by Isaias Romero P. in
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Por: Renson Said
No voy hablar del presidente Santos sino del
informe que el equipo de Memoria Histórica acaba de entregar al país según el
cual, en Colombia, desde 1958 hasta el 2012, o sea, desde el gobierno de
Alberto Lleras Camargo hasta el año pasado, ha habido 220 mil muertos (8 de
cada 10 eran civiles). Supongo que aquí no alcanzaron a incluir a los cuatro
campesinos asesinados por la fuerza pública durante el reciente paro del
Catatumbo, tres de los cuatro recibieron tiros de fusil. Porque esa es la
costumbre en Colombia, reprimir la protesta campesina a punta de bala. Y
resulta que así no se soluciona nada, al contrario, se exacerba la crisis, se
profundiza el problema, se abre más la herida y el escenario para el diálogo
resulta inexpugnable.
Aunque el informe no tiene en cuenta los sucesos
del 9 de abril del 48, ni la presidencia de Mariano Ospina Pérez que cerró el
Congreso de la República de mayoría liberal instaurando así una
dictadura civil (y que de alguna manera fue el responsable de las matanzas
políticas de la segunda mitad del siglo XX), lo que consigna el documento es
suficiente para que todos sintamos vergüenza de la manera como estamos
acostumbrados a resolver las diferencias.
No están tampoco incluidos aquí los crímenes del
sicariato, de la delincuencia común, las muertes por violencia
intrafamiliar, ni las producidas por el UPAC. Porque hubo mucha gente que se
suicidó cuando se dio cuenta que el UPAC les quitaba la casa y que además la
deuda era impagable.
Este informe debería llevar una cintilla de
advertencia que diga: “no apta para menores de edad”. O, como en los programas
de televisión: “el siguiente informe contiene escenas de sexo y violencia, se
recomienda la compañía de adultos responsables”. Pero resulta que en los
últimos 55 años no hemos tenido adultos responsables y los menores
de edad son reclutados para la guerra o asesinados. Según esta investigación
6421 niños han sido reclutados por grupos armados y 4 millones 744 mil familias
han sido desplazadas.
Imagen tomada de www.eltiempo.com
Y si esto no estremece a nadie, aquí va otro dato: en 54 años de violencia se han presentado 1982 masacres, de las cuales 1166 fueron responsabilidad de los paramilitares, 343 de los grupos guerrilleros, 295 de grupos desconocidos, 158 de la fuerza pública y otras tantas cometidas por la mezcla entre paramilitares y fuerza pública. El número de gente desparecida desde entonces es igual al número de habitantes de países como Irlanda.
Una de las conclusiones del informe de Memoria Histórica es que los paramilitares asesinan más, mientras los grupos guerrilleros secuestran y causan más destrucción. No he leído el informe completo, escribo basándome en lo que ha publicado la prensa, pero me arriesgo a lanzar una hipótesis: todo esto tiene un origen común, y son las monstruosidades cometidas por los distintos gobiernos desde hace más de 50 años. Fueron esas monstruosidades y sus excesos las que obligaron a los campesinos a autodefenderse, creando así, a las guerrillas. Los excesos de esas guerrillas dieron origen a las autodefensas paramilitares, que, con la ayuda del Estado y la fuerza pública, hicieron invivible el país. Todos estos grupos fueron fortalecidos por el narcotráfico.
Lo que me preocupa del informe es que no haya ningún político por ahí culpable de algo. Recordar algunos nombres es lo que se llama memoria histórica.